Y dirá usted: ¿esta pendeja de qué se queja si tiene perforaciones? Pero entienda que no es lo mismo sentir como una "aguja" te atraviesa la piel [o la lengua] a sentir como un pinche aguja mete noséquetantasmadres a tu cuerpo.
Además, creo que todos coincidimos en que es nada placentera una vacuna aplicada por alguna enfermera del IMSS, desas que tienen cara de bulldog con estreñimiento, jugando dardos y usando tu brazo [o nalgas] de diana.
Cuando iba en la primaria, sufría las de Caín porque siempre fui una mocosa [literalmente] que se enfermaba de amigdalitis cada 15 días y me tenían que vacunar diario y si a esa aberración de la vida, le sumamos las pedorras campañas de vacunación que visitan las escuelas y yo sin tener a quien apretarle la mano para demostrar mis sufrimiento, pues peor.
En una de esas, me tocó una vacuna que era vía intramuscular [dícese: en mi rozagante trasero] y ahí estaba yo, una párvula de 10 años, formadita esperando mi turno para convertirme en alfiletero y cagándome de miedo porque ¡qué pinche razón tenía para ponerme así!: La pendeja enfermera me puso mal la inyección, estuve una semana sin poder sentarme bien y con un moretón que parecía que iba a hacer que mi nalga se cayera en pedacitos.
El doctor de la familia [¡aaaah, qué mamada de expresión!] un viejito que arreglaba toooooooooooodo con inyecciones, me recetó otras para que mi culitoculito no se quedara como pasita y de nuevo sufrí: me tocaron dos pinches inyecciones diarias, la vacuna para que no me enfermara de amigdalitis y el piquete para que no se me cayera la nalga.
Definitivamente, hoy no debí salir de mi casa ni para que me diera el aire. Primero, estuve a punto de ser atropeyada por un taxi y todo por andar buscando mis cigarros en mi mochila, y segundo, porque hoy fue el examen médico de la escuela y ¡toooooooooooooma! aparte de llenar hojas de Melate para responder preguntas pendejas, me tocaron dos pinches vacunas, una en cada brazo.
La primera fue contra el tétanos, con eso de que me gusta andar por la vida jugando con fierros oxidados, pues la consideré importantísima hasta que vi la jeta de la enfermera que me la pondría: era un especie de Ewok con síndrome premenstrual, con batita blanca y cosita blanca pedorra en la cabeza. Después de que me quité la sudadera para que agujerease mi brazo con toda confianza, me dijo con voz gangosa: "¿en qué brazo te la pongo?" y le contesté que en el derecho.
Y así fue, sentí como la aguja entraba en mi brazo pero no sentía el pinche líquido... y así pasaron como tres o cuatro minutos y nada, pensé: "a lo mejor, me está inyectando un litro para que nunca en la vida me de tétanos" pero no, cuando miré, la jeringa estaba ahí abandonada, colgando de mi brazo porque la pinche enfermera había tirado el algodón con alcohol y estaba tratando de sacar uno nuevo para limpiar la moronga que me saldría después de dejarme como toro lleno de banderillas.
Finalmente, sentí como el pinche líquido entraba en mi cuerpo y hacía que todo el brazo se me entumeciera, para que el Ewok ese me dijera: "listo ¿verdá qué ni dolió?". Sólo atiné ponerle mi sonrisa de "chingatuputamadre" y me fui a formar a la fila de la otra inyección, donde afortunadamente corrí con suerte, esa enfermera fue muy amable, tanto que se quedó pegada a mi brazo con su algodoncito alcoholoso hasta que no salió más sangre y juro que si hubiese tenido paletas, me hubiera dado una ¡lo juro!
Tanto es el dolor de mis brazos, codos y manos, que he tardado una hora y media escribiendo todo esto y para acabarla de chingar, tengo que ponerme otras dos dentro de un pinche mes, así que no se pierda la continuación de: "LauRa goes to IMSS"
Además, creo que todos coincidimos en que es nada placentera una vacuna aplicada por alguna enfermera del IMSS, desas que tienen cara de bulldog con estreñimiento, jugando dardos y usando tu brazo [o nalgas] de diana.
Cuando iba en la primaria, sufría las de Caín porque siempre fui una mocosa [literalmente] que se enfermaba de amigdalitis cada 15 días y me tenían que vacunar diario y si a esa aberración de la vida, le sumamos las pedorras campañas de vacunación que visitan las escuelas y yo sin tener a quien apretarle la mano para demostrar mis sufrimiento, pues peor.
En una de esas, me tocó una vacuna que era vía intramuscular [dícese: en mi rozagante trasero] y ahí estaba yo, una párvula de 10 años, formadita esperando mi turno para convertirme en alfiletero y cagándome de miedo porque ¡qué pinche razón tenía para ponerme así!: La pendeja enfermera me puso mal la inyección, estuve una semana sin poder sentarme bien y con un moretón que parecía que iba a hacer que mi nalga se cayera en pedacitos.
El doctor de la familia [¡aaaah, qué mamada de expresión!] un viejito que arreglaba toooooooooooodo con inyecciones, me recetó otras para que mi culitoculito no se quedara como pasita y de nuevo sufrí: me tocaron dos pinches inyecciones diarias, la vacuna para que no me enfermara de amigdalitis y el piquete para que no se me cayera la nalga.
Definitivamente, hoy no debí salir de mi casa ni para que me diera el aire. Primero, estuve a punto de ser atropeyada por un taxi y todo por andar buscando mis cigarros en mi mochila, y segundo, porque hoy fue el examen médico de la escuela y ¡toooooooooooooma! aparte de llenar hojas de Melate para responder preguntas pendejas, me tocaron dos pinches vacunas, una en cada brazo.
La primera fue contra el tétanos, con eso de que me gusta andar por la vida jugando con fierros oxidados, pues la consideré importantísima hasta que vi la jeta de la enfermera que me la pondría: era un especie de Ewok con síndrome premenstrual, con batita blanca y cosita blanca pedorra en la cabeza. Después de que me quité la sudadera para que agujerease mi brazo con toda confianza, me dijo con voz gangosa: "¿en qué brazo te la pongo?" y le contesté que en el derecho.
Y así fue, sentí como la aguja entraba en mi brazo pero no sentía el pinche líquido... y así pasaron como tres o cuatro minutos y nada, pensé: "a lo mejor, me está inyectando un litro para que nunca en la vida me de tétanos" pero no, cuando miré, la jeringa estaba ahí abandonada, colgando de mi brazo porque la pinche enfermera había tirado el algodón con alcohol y estaba tratando de sacar uno nuevo para limpiar la moronga que me saldría después de dejarme como toro lleno de banderillas.
Finalmente, sentí como el pinche líquido entraba en mi cuerpo y hacía que todo el brazo se me entumeciera, para que el Ewok ese me dijera: "listo ¿verdá qué ni dolió?". Sólo atiné ponerle mi sonrisa de "chingatuputamadre" y me fui a formar a la fila de la otra inyección, donde afortunadamente corrí con suerte, esa enfermera fue muy amable, tanto que se quedó pegada a mi brazo con su algodoncito alcoholoso hasta que no salió más sangre y juro que si hubiese tenido paletas, me hubiera dado una ¡lo juro!
Tanto es el dolor de mis brazos, codos y manos, que he tardado una hora y media escribiendo todo esto y para acabarla de chingar, tengo que ponerme otras dos dentro de un pinche mes, así que no se pierda la continuación de: "LauRa goes to IMSS"
Comentarios
mmm...a mí me gusta que me inyecten, estoy loca! @_@ cada vez que hacen un experimento en la scuela yo me ofrezco, quiza en uno de esos me arruinaron el cerebro!!!
Me picaban tanto que hasta una vez mi mamá pregunto que si me drogaba!! porq tenia mis 2 brazitos pinchados jo jo jo Y dijeras tu! lo hacen enfermeras o docs, ni mais, lo hacen puros estudiantes...
juar juar...
Saludos!
e.
no mames me cague de risa con eso!
pooooooooocas veces me han inyectado, de hecho hace años que no veo una jeringa rondando como vampiro mis brazos o mi trasero
odio las inyecciones
JOjojojo
Yo neta tiene un buen que no me vacuno contra nada, creo que debo ver qué pedo.
xthuubn
Que valiente!!
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jajaja jajaja no mames no mames no puedo dejar de reirme de ti!!! =)
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jijijijiji ash perdon!
no pues es cierto a nadie nos gustan las inyecciones pero al menos yo aprendí a no tenerles miedo, después de cierta situación y ps digamos que hasta las vi como mis amigas porque jugaron un papel importante para, básicamente, salvar mi vida xD suerte!
Saludos, por cierto ¿a qué tupo de fierros te refieres cuando juegas? !___!
y se que ni al caso, pero lo mencionaré...
yo conozco a alguien que se excita con las inyecciones, ahhhh! cada vez que lo menciona, de verdad me saca de onda, jajajaja
saludos, y suerte con tus hematomas jajaja
...Yo pongo otro tipo de inyecciones...!!jejeeje
;-P
Saludos